La Crónica Imprevista

Antes de comenzar, disculpen si no he podido ser consecuente con mis escritos, pero la verdad entre mi mala (por no decir pésima) conexión wireless USB de MOVISTAR y las actividades de la semana, no me han dejado ni escribir ni subir contenido. Gracias a dios es fin de semana...

Hace una semana cuando estuve por mi terruño carabobeño, decidí ir a ver si me entraba la inspiración con cámara en mano, y me fui caminando con mi pana German hacía la entrada del Parque Municipal Casupo, para que él lo conociera y para yo recordar.
La nostalgia me invadió, pero también el asombro. Ver que todavía, a pesar de los rumores que he escuchado sobre asaltos y hampa común invadiendo este paraiso creado por los ciudadanos, sigue siendo el preferido de muchos. Todo tranquilo, sin mas musica que la naturaleza misma. Mas sorpresas me llevé al ver el tamaño de la vegetación, mucha de la cual vi en retoño.
No subimos porque andabamos en la ropa menos apropiada, pero si vimos muchas cosas, como por ejemplo el trabajo constante que estan haciendo quienes cuidan este parque, sembrando miles y miles de nuevos arboles. Encontrar todos esos semilleros esperando su turno fue lo mejor y mas esperanzador que he visto en mucho tiempo, la verdad.
Tengo pensado volver (con mejor atuendo y calzado), porque NECESITO subir al que entonces era mi santuario, donde iba religiosamente dia a dia para tomar aire.
Una vez hasta lleguè a ver un zorro (juro 100% que no era ninguna clase de perro callejero), y la verdad fue poético.
Si tienen la oportunidad, vayan, preparados a que la subida es empinada, con reserva de agua, bien ligeros de equipaje, y a sudar se ha dicho!...

JLGQ 2009.

Etiquetas: Carabobo, Casupo, Park, parque municipal, Venezuela